Es inevitable que nuestros ojos lloren de vez en cuando. Sin embargo, aunque sea un proceso natural, si las lágrimas fluyen en exceso, puede ser una señal de alerta. Muchos pacientes acuden a nuestros oftalmólogos en Alicante debido a que tienen dificultades a la hora de realizar actividades cotidianas como leer, conducir o trabajar frente a una pantalla y buscan una solución.
Este fenómeno, conocido como epífora, puede ser indicativo de diversas condiciones que afectan la salud ocular y en este artículo podrás encontrar cuáles son sus causas más frecuentes y cuáles son los tratamientos que realizamos en nuestra consulta.
Causas de ojos llorosos
Existen diversas razones por las que los ojos pueden producir un exceso de lágrimas
Alergias
Una de las principales razones por las que nos pueden llorar los ojos son las alergias. Entre 15% y el 20% de la población tienen algún tipo de alergia que influye en el exceso de lágrimas.
Durante temporadas de alta concentración de polen o en presencia de otras partículas como polvo o pelo de animales, tendemos a tener los ojos más llorosos de lo habitual, provocando enrojecimiento y picazón.
¿Por qué se produce? Porque nuestro ojo está intentando eliminar los alérgenos.
Irritaciones oculares
Otra de las causas más comunes del exceso de lágrimas son las sustancias irritantes, como el humo, el viento o el maquillaje.
Además, otros factores que hacen que nos lloren más los ojos son:
- Lentillas mal ajustadas
- Uso excesivo de pantallas sin descanso
Ojo seco
Contrariamente a lo que se podría pensar, el ojo seco también puede causar un exceso de lágrimas. Cuando los ojos están resecos, intentan compensar produciendo una gran cantidad de lágrimas para hidratarse.
Según estudios, la prevalencia en personas mayores de 40 años oscila entre el 38% y el 68%, y es más frecuente en mujeres
Obstrucción del conducto lagrimal
La obstrucción lagrimal es una causa frecuente de lagrimeo excesivo, especialmente en bebés y personas mayores de 60 años.
Los conductos lagrimales permiten que las lágrimas drenen de los ojos hacia la cavidad nasal. Cuando estos conductos están obstruidos o bloqueados, las lágrimas no pueden drenar correctamente, acumulándose en el ojo y provocando lagrimeo constante.
Síntomas de un exceso de flujo lagrimal
El lagrimeo excesivo no solo implica tener los ojos húmedos todo el tiempo, sino que puede ir acompañado de otros síntomas que deben ser tenidos en cuenta.
Algunos de los síntomas que se asocian al lagrimeo excesivo son:
- Enrojecimiento ocular
- Sensación de ardor o picazón
- Visión borrosa
- Dolor en el área alrededor del ojo
- Hinchazón en los párpados
¿Qué puedo hacer si me lloran mucho los ojos?
Dependiendo de lo que provoque el exceso de lágrimas, se pueden utilizar diferentes tratamientos.
Tratamientos para alergias
En el caso de que las alergias sean la causa del lagrimeo excesivo, es recomendable reducir la exposición a los alérgenos que hemos comentado anteriormente.
Además, el uso de antihistamínicos (en forma de colirio o comprimidos) puede ayudar a aliviar los síntomas. Esto siempre se debe hacer bajo prescripción de un profesional médico.
Soluciones para la obstrucción lagrimal
En casos leves, el oftalmólogo puede recomendar masajes en el área del lagrimal o el uso de soluciones salinas. En situaciones más graves, pueden requerirse procedimientos como la dilatación o cirugía para restablecer el flujo normal de las lágrimas.
Manejo del ojo seco
Para tratar el ojo seco, se recomienda el uso de lágrimas artificiales o lubricantes para mantener el ojo lo más hidratado posible.
Además, es aconsejable evitar ambientes secos o con mucho viento y hacer pausas frecuentes si pasas mucho tiempo frente a la pantalla.
Aunque no suele ser un problema grave, sí que resulta molesto para muchos pacientes. Si notas que el lagrimeo excesivo persiste, lo más recomendable es ponerse en mano de nuestros oftalmólogos para buscar el mejor tratamiento.