Obstrucción lagrimal
¿Qué es la obstrucción lagrimal?
La obstrucción lagrimal se da cuando el sistema de drenaje de las lágrimas es parcial o nulo a causa de estar obstruido. Cuando las lágrimas no pueden ser drenadas con normalidad, llegan a causar ojos irritados, acuosos e incluso con infecciones oculares crónicas.
A ese lagrimeo continuo también se le llama epifora. Cuando se padece esta patología, es precisa una evaluación por el oftalmólogo, ya que dificultará nuestra actividad diaria.
Síntomas Obstrucción lagrimal
Suelen aparecer cuando se ha tenido infecciones repetidas en el conducto lagrimal. Los síntomas más frecuentes son:
- Lagrimeo constante y molesto en el ojo
- Irritación ocular constante
- Aparición de legañas
- Visión borrosa
En el caso de los niños, se produce porque no se ha desarrollado por completo la vía lagrimal.
Tratamiento Obstrucción lagrimal
Para tratar los problemas derivados de una obstrucción lagrimal, únicamente se puede tratar mediante una intervención quirúrgica.
La dacriocistorrinostomía, que así se denomina la intervención, consiste en colocar en el ojo un conducto alternativo al que está obstruido para lograr la expulsión o evacuación de las lágrimas.
Actualmente, se practica con láser diodo, ya que es más cómodo para acabar con la obstrucción del lagrimal o de los lagrimales y además, se evitan heridas en el ojo por la operación.
Con esta intervención, puede crearse un nuevo orificio para el drenaje si el antiguo conducto está muy obstruido, o bien se amplía el conducto existente si su obstrucción es parcial.
Resultados tras el tratamiento
Gracias a las técnicas muy bien afianzadas y a los avances tecnológicos, el paciente notará de forma progresiva que el lagrimeo constante irá desapareciendo. Así como se reducen las molestias que antes le estaban ocasionando.