Operación de hipermetropía

cirugia para eliminar la hipermetropia en el ojo

La operación de hipermetropía es una de las soluciones más eficaces para corregir la dificultad de ver de cerca sin depender de gafas ni lentillas. Gracias a los avances en cirugía refractiva, hoy en día existen diferentes técnicas como el láser LASIK, el PRK o la implantación de lentes intraoculares, que permiten enfocar la luz correctamente sobre la retina y recuperar una visión nítida y estable.

En Oftálica, somos especialistas en cirugía de afecciones visuales. En este artículo te explicamos cómo es la operación de hipermetropía paso a paso, el proceso de recuperación y los resultados que puedes esperar tras la intervención.

Cirugías para corregir la hipermetropía

La cirugía refractiva tiene como objetivo modificar la forma en que el ojo enfoca la luz para que esta se proyecte correctamente sobre la retina. Existen diferentes técnicas quirúrgicas para lograrlo.

Cirugía láser

La cirugía láser es la técnica más utilizada para corregir la hipermetropía leve o moderada. Mediante un láser de alta precisión, se remodela la curvatura de la córnea para modificar la forma en que la luz incide sobre la retina, consiguiendo así una visión más clara y natural.

  • LASIK: es la técnica más conocida y segura. Se levanta una fina capa de la córnea y se aplica el láser en las capas internas para modificar su curvatura. La recuperación suele ser muy rápida, en apenas 24-48 horas.
  • PRK (o LASEK): se utiliza en pacientes con córneas delgadas o con ciertas limitaciones anatómicas. En este caso, el láser actúa directamente sobre la superficie de la córnea. La recuperación es algo más lenta, pero los resultados son igualmente efectivos.
  • SMILE: técnica mínimamente invasiva que no requiere levantar un colgajo corneal. Es muy precisa, indolora y ofrece una recuperación estable y cómoda.

Estas cirugías se realizan de forma ambulatoria, con anestesia local en gotas, y permiten corregir también defectos refractivos asociados, como el astigmatismo.

Implantación de lente intraocular

Las lentes intraoculares son una excelente opción para pacientes con hipermetropías altas o que no son candidatos al láser por tener córneas finas o secas.
En esta técnica, se introduce una lente artificial dentro del ojo, delante o detrás del iris, que actúa como una lente adicional al sistema óptico natural. Esta lente no sustituye al cristalino, sino que complementa su función, proporcionando una visión nítida sin alterar la estructura del ojo.

En pacientes mayores de 45 años o con signos de presbicia e hipermetropía, puede optarse por lentes intraoculares multifocales o trifocales, que corrigen la visión de lejos y de cerca al mismo tiempo, reduciendo la necesidad de gafas tras la cirugía.

Operación combinada de hipermetropía y astigmatismo

Muchos pacientes presentan hipermetropía y astigmatismo al mismo tiempo, lo que provoca una visión borrosa tanto de cerca como de lejos. En estos casos, se puede realizar una cirugía refractiva combinada, diseñada para corregir ambos defectos en una sola intervención.

Tanto las técnicas láser (LASIK o SMILE) como las lentes intraoculares tóricas permiten corregir simultáneamente la curvatura irregular de la córnea (astigmatismo) y el enfoque posterior (hipermetropía). Los resultados suelen ser excelentes, ofreciendo una visión más estable, natural y precisa sin necesidad de corrección óptica adicional.

Cómo es la operación de hipermetropía paso a paso

Es un procedimiento rápido, seguro y mínimamente invasivo que permite corregir el enfoque visual en cuestión de minutos.

Preparación y pruebas previas

Antes de la cirugía, es fundamental realizar un estudio preoperatorio exhaustivo para determinar el tipo exacto de hipermetropía, la salud corneal y la técnica más adecuada. Este estudio incluye:

  • Topografía corneal: para analizar la forma y el grosor de la córnea.
  • Biometría ocular: que mide la longitud del globo ocular.
  • Aberrometría y refracción completa: para identificar con precisión la graduación.
  • Evaluación del lagrimal y presión intraocular.

Además, se recomienda suspender el uso de lentillas unos días antes de las pruebas para no alterar la superficie ocular. Tras la valoración, el oftalmólogo explica la técnica más indicada  y resuelve todas las dudas sobre la intervención y la recuperación.

Duración y procedimiento quirúrgico

La operación de hipermetropía es ambulatoria, se realiza con anestesia local en forma de gotas y tiene una duración de entre 10 y 20 minutos por ojo. Durante el procedimiento, el paciente permanece despierto y no siente dolor, solo una ligera presión o sensación de contacto.

Una vez finalizada la intervención, el paciente puede volver a casa el mismo día con la protección ocular adecuada y las recomendaciones del especialista.

Postoperatorio inmediato

Tras la operación, es normal experimentar ligeras molestias o sensación de arenilla en los ojos durante las primeras horas, que desaparecen con el tratamiento indicado. La visión puede verse algo borrosa al principio, pero mejora de forma progresiva a medida que el ojo cicatriza.

En la mayoría de los casos, el paciente recupera una visión funcional en 24 a 48 horas, pudiendo retomar actividades cotidianas ligeras al día siguiente. Se recomienda no frotar los ojos, evitar el maquillaje y protegerlos del polvo o el agua durante los primeros días. En Oftálica, el equipo médico realiza un seguimiento personalizado para asegurar una recuperación segura y unos resultados visuales óptimos.

Recuperación tras la intervención para la hipermetropía

El periodo de recuperación suele ser rápido y cómodo, especialmente cuando se emplean técnicas modernas. Aunque los tiempos pueden variar según el tipo de intervención y las características del paciente, en general los resultados visuales se notan en pocos días y mejoran progresivamente durante las siguientes semanas.

Tiempo de recuperación visual

Después de una operación de hipermetropía con láser, la mayoría de los pacientes experimentan una mejora significativa de la visión en las primeras 24-48 horas. En los casos tratados con lentes intraoculares, la adaptación visual puede tardar unos días más, pero los resultados son igualmente satisfactorios.

Durante la primera semana es normal notar cierta sensibilidad a la luz, visión ligeramente borrosa o pequeñas variaciones en la nitidez. Estas molestias desaparecen gradualmente conforme el ojo se adapta y cicatriza completamente.

Cuidados y precauciones tras la operación

Durante los primeros días tras la cirugía, seguir las indicaciones médicas es clave para garantizar una recuperación óptima. En Oftálica recomendamos:

  • No frotar los ojos ni aplicar presión sobre ellos.
  • Evitar maquillaje, piscinas y saunas durante al menos una semana.
  • Utilizar las gotas antibióticas y antiinflamatorias recetadas para prevenir infecciones.
  • Proteger los ojos con gafas de sol en exteriores para reducir la sensibilidad a la luz.
  • Dormir con el protector ocular si el especialista lo indica.

Estas precauciones ayudan a mantener la superficie ocular hidratada, reducir el riesgo de complicaciones y favorecer una recuperación visual más rápida y estable.

Revisión médica y seguimiento oftalmológico

Las revisiones postoperatorias son una parte fundamental del tratamiento. En Oftálica realizamos un seguimiento personalizado que incluye visitas de control a las 24-48 horas, a la semana, al mes y a los tres meses tras la cirugía.
Durante estas revisiones, el oftalmólogo comprueba la evolución de la cicatrización, la calidad visual y la estabilidad de la graduación, ajustando el tratamiento si es necesario.

Resultados y beneficios de la operación

La cirugía de hipermetropía ofrece resultados muy predecibles y seguros. La mayoría de los pacientes logran una visión nítida y estable sin necesidad de gafas o lentillas, mejorando notablemente su comodidad visual y calidad de vida.

El éxito de la cirugía depende de una correcta evaluación preoperatoria, de la técnica empleada y del cumplimiento de las indicaciones médicas durante la recuperación.

Mejoras en la visión y calidad de vida

Tras la cirugía, los pacientes experimentan una visión más clara, natural y relajada, tanto para tareas cercanas como para actividades cotidianas. Entre los principales beneficios destacan:

  • Reducción o eliminación total de la dependencia de gafas o lentillas.
  • Mayor comodidad visual en la lectura, el trabajo con pantallas o la conducción.
  • Recuperación rápida, con resultados estables a largo plazo.
  • Mejora en la autoestima y en la calidad de vida diaria.

Gracias a las técnicas actuales, los resultados suelen mantenerse estables durante años, ofreciendo una visión funcional excelente en la mayoría de los casos.

Riesgos y posibles efectos secundarios

Como cualquier procedimiento quirúrgico, la operación de hipermetropía puede implicar efectos secundarios leves o transitorios, que son controlados y tratados fácilmente por el equipo médico. Entre ellos se incluyen:

  • Sequedad ocular durante las primeras semanas.
  • Deslumbramientos o halos nocturnos, que tienden a desaparecer con el tiempo.
  • Visión fluctuante o sensación de arenilla en los primeros días postoperatorios.

Los riesgos graves son muy poco frecuentes y se minimizan gracias al uso de equipos de última generación y a la experiencia de los cirujanos. En Oftálica realizamos un seguimiento personalizado y continuo para asegurar una recuperación segura y unos resultados visuales óptimos en cada paciente.

Oftálica: especialistas en cirugía láser e implantación de lentes intraoculares

Nuestro equipo médico combina una amplia experiencia con la tecnología más avanzada para ofrecer resultados precisos, seguros y adaptados a las necesidades de cada paciente.

Si estás valorando una operación de hipermetropía, en Oftálica te acompañamos en todo el proceso: desde el estudio preoperatorio y la elección de la técnica más adecuada, hasta la recuperación y seguimiento personalizado. Recupera una visión clara y sin gafas con la confianza de estar en manos de oftalmólogos especialistas en cirugía láser.

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