Como ya hemos analizado en otros artículos, en el ámbito de la oftalmología podemos encontrar muchos mitos en internet. Fruto de la poca información o del miedo, cada vez son más las personas que pueden creerse todo lo que leen. Ya descubrimos que la degeneración macular no solo afecta a las personas mayores, ni que los suplementos dietéticos pueden curarla.
Las patologías son las que más pueden verse afectadas por estos mitos, pero los tratamientos no se quedan atrás, sobre todo los que son de forma de cirugía. En este caso, la cirugía refractiva, al ser el tratamiento que más se realiza al año, es la que más mentiras podemos encontrar en Internet. ¿Es verdad que duele? ¿Puede causar ceguera?
La cirugía refractiva es dolorosa
«Doctor, he leído que la cirugía refractiva duele». Esta es una de las afirmaciones que más se repiten en nuestras consultas. El dolor es uno de los principales temores de las personas que se van a someter a este tratamiento.
Sin embargo, es uno de los procedimientos más indoloros en el ámbito de la oftalmología. Antes de la cirugía, se aplican unas gotas anestésicas en el ojo para adormecerlo y, así, no sentir nada durante la intervención.
Después de la cirugía, lo común es sentir alguna molesta o incomodidad, pero no dolor. Es algo temporal y se puede controlar con analgésicos y gotas oculares.
La cirugía refractiva afecta la calidad de la visión nocturna
Algunas personas creen que la cirugía refractiva puede empeorar la visión nocturna, pero se trata de otro los mitos más populares de este tratamiento.
Los pacientes pueden experimentar dificultades en la visión nocturna antes de la cirugía debido a problemas refractivos como la miopía o el astigmatismo. La cirugía refractiva busca corregir estos errores de refracción, lo que puede mejorar la calidad de la visión en general, incluida la visión nocturna.
De hecho, muchos pacientes informan que la cirugía refractiva mejora su visión nocturna, ya que pueden ver mejor sin lentes o gafas que puedan crear reflejos y distorsiones en la visión.
Causa ceguera
Es comprensible que la idea de someterse a una cirugía ocular pueda generar preocupación, ya que los ojos son una parte extremadamente importante y sensible del cuerpo.
El mito de que la cirugía refractiva puede causar ceguera es infundado y no está respaldado por la evidencia científica ni por la experiencia clínica.
Los avances en tecnología y técnicas han minimizado aún más los riesgos y mejorado los resultados visuales. La cirugía refractiva moderna, como el LASIK y el PRK, es un procedimiento seguro y efectivo que ha sido realizado en millones de personas en todo el mundo.
Para reducir aún más los riesgos, en Oftálica llevamos a cabo una evaluación minuciosa antes de recomendar la cirugía refractiva y siguen protocolos rigurosos durante el procedimiento para garantizar la seguridad del paciente
Es cara
La percepción de que la cirugía refractiva es costosa puede deberse a varios factores: como la falta de información completa sobre los costes reales, la variabilidad de los precios entre diferentes clínicas y situación geográfica.
Algunos factores que pueden influir en el precio de la cirugía refractiva incluyen:
- El tipo de procedimiento
- La tecnología utilizada
- Experiencia del cirujano
- Situación geográfica
Aunque la cirugía refractiva puede implicar un coste inicial, a largo plazo puede resultar en ahorros significativos en gastos relacionados con lentes de contacto, gafas y soluciones de cuidado ocular.
Además, en muchas clínicas como Oftálica, ofrecen una financiación de hasta 24 meses sin intereses, colaborando con diversas entidades financieras y sin costes adicionales por gestionar la solicitud.
Como has podido ver, podemos encontrar diferentes bulos en Internet acerca de la cirugía refractiva. Por ello, si estás pensando en llevar a cabo esta intervención es mejor contactar con un profesional y gestionar tus dudas. En Oftálica contamos con los mejores médicos expertos en cirugía refractiva. ¡Te esperamos!